Un bamboleo en la órbita de Marte podría ser un signo de materia oscura, sugiere un nuevo estudio. El estudio se basa en la idea de que la materia oscura en realidad está formada por miles de pequeños agujeros negros primordiales: agujeros negros tan pequeños que son esencialmente microscópicos. Se cree que estos agujeros negros se formaron en los primeros momentos posteriores al Big Bang.

Esta teoría se introdujo por primera vez en la década de 1970, pero recientemente ha comenzado a ganar más fuerza. Sin embargo, a diferencia de los agujeros negros astrofísicos más conocidos que los científicos descubren y estudian en todo el universo, los agujeros negros primordiales se forman cuando bolsas de gas denso colapsan en el universo primitivo. Por tanto, se encuentran dispersos por todo el universo a medida que se expanden y se enfrían.

Es posible que existan agujeros negros primordiales y que sean tan pequeños como un átomo. Crédito de la imagen: Vadimsadovski/Adobe

Debido a que se han colapsado en formas muy pequeñas, la inmensa masa dentro de ellos los hace muy pesados: tan pesados ​​como uno de los asteroides más grandes, pero tan pequeños como un átomo. Además, los científicos creen que estos agujeros negros primordiales son lo que conocemos como materia oscura y que los signos de esta materia oscura pueden presentarse en forma de pequeñas oscilaciones en las órbitas planetarias.

Estos bamboleos, un Un nuevo estudio Publicado en Examen físico Sugiere que la gran masa del agujero negro puede ser el resultado de que un agujero negro primordial se acerca a un planeta, desviando ligeramente su órbita de su rumbo. Para comprobar si esto era posible, los investigadores comenzaron a armar diferentes simulaciones de la órbita de Marte y sus cambios a lo largo de los años.

Descubrieron que los datos coincidían con su línea de pensamiento. Sin embargo, antes de que podamos decir clara e inequívocamente que estas oscilaciones son signos de materia oscura, es necesario demostrarlo con datos reales. Queda por ver si eso es posible o no. Por ahora, sin embargo, es al menos una teoría muy interesante que los científicos seguramente dedicarán algún tiempo a debatir.